Alushe de barro de clase a barrio 5 y 6

Hola queridos lectores, casi no he tenido tiempo, pero me di el espacio para seguir escribiendo con mi amiga Aurora, realmente le hemos dedicado un poco mas a estos capítulos. Si llega a los 30 comentarios, sin que repita las personas que ya comentaron, publicaremos la sig parte, el miércoles 1 de Junio :)) (RECUERDEN QUE LA SIG PARTE VA A SER EN SU BLOG)

Andrés, un estudiante común de una clase acomodada, vive una vida normal pero gracias a las desciones que ha tomado lo llevan a caer en una vida muy distinta de la que acostumbraba. Ahora siendo una mujer menos privilegiada, tendrá que arreglárselas para recuperar su cuerpo.  

 Capítulo 5

La vida siguió la rutina, su semana ,estuvo aburrida, no vio su cuerpo toda la semana, no tenía internet propio, solo usaba la señal gratis de la CDMX, la señal era pésima pero le servía para stalkear sus redes sociales. Y para terminarla de chingar, no conforme a tener que trabajar y ser pobre, tuvo la menstruación por primera vez, sintió los cólicos. -Si vuelvo a mi cuerpo, nunca más molestare a las chicas con su estado de ánimo en relación con su periodo…..- 

La vida de Andrés después de ese lunes siguió igual, su hermana pasó por él durante toda la semana y fue en esa misma semana cuando experimentó sufrir la menstruación por primera vez, la desesperación de ver que se desangraba lo invadió creyó que iba morir .Y aún con todo ese dolor y mezcla de emociones se vio obligado a chingarle, porque esa comida no se iba a pagar sola.

Cuando regresaba a su casa por las noches recordaba la frase que le había dicho aquella mujer que al parecer era su hermana. -ya báñate pinche cerda-. Esa frase lo estuvo persiguiendo durante días.   

Sabía que su nueva anatomía no era la misma, su cuerpo ahora olía diferente, aparte de que el sudor se acumulada debajo de sus pesadas tetas durante el caluroso día en su puesto, ya no era el chico delgado, alto y blanco, ahora era más baja y tenía una mayor cantidad de grasa corporal, cuando se metía en la regadera evitaba verse en el espejo para no tener que mortificarse más, evitaba tocar las pequeñas llantitas en su panza y cruzaba los brazos para evitar el movimiento de las protuberancia que salían de su pecho.

Había momentos en los que la desesperación y el conflicto lo hacían llorar, ahora era más fácil ponerse a llorar, ahora era más sentimental -¿por qué a mí?, ¿qué hice para merecer esto?-.Se decía mientras lloraba en el baño , baño las gotas de agua empezó a consolarse asimismo , recorrió con caricias su nuevo cuerpo , esto parecía hacerla sentir mejor y olvidar su condición , se hizo consciente de las tetas que ahora poseía y de los sensibles que eran , recordó como se había manoseado la vez anterior y busco nuevas formas por más que odiara sentir esas sensaciones de alguna manera lo hacía sentir mejor y olvidar momentáneamente su estrés.

Salió del baño, se puso su nueva ropa y se dispuso , fue ahí cuando recordó

-No, no  la niña de esa mujer!!!!-. Se preocupó.-Hay que prepararle su cena!-, salió del cuarto con el pelo aún mojado y llamó a la niña, -Mami,me duele la pancita, ¡tengo hambre!-. 

-SI SÍ, YA SE NIÑA!!!-. Empezó a buscar en la despensa, y solo encontró atún y maruchan, era lo único que había comprado. -Mmmm mira ten-. Le dio la maruchan. -Pero mami no me gusta ...- empezó a llorar.

 -NO, NO, mira esta… está muy rica-. Le dio una probada. -MMMH, si esta muy rica.- Jamás había comido sopa maruchan, pero a pesar de todo su esfuerzo por convencerla no pudo hacer que la niña comiera. Este Andrés estaba desesperado. 

Toc toc toc

-Ay no, es esta mujer.- dijo desesperado y aterrorizado. 

-Gladys, abreme culera, ya te escuche jajajaja-. Andres trató de ignorarla, pero no podía hacer más nada que abrirle. -Camara pinche Gladys, te tardas un chingo!! ¿Dónde está mi sobrina?. estaba de buen humor. 

Andrés: -Está en….-

La hermana: -¿QUÉ?-. 

Andrés:-Está en el c…..-. 

La hermana -QUÉ??-. 

Andrés: -ESTÁ EN EL COMEDOR!!!!-  

La hermana: -Ya ya, no te enojes a ver-.  En eso vio a la niña sentada comiendo sopa maruchan. -GLADYS!!!!, QUÉ CHINGADA MADRE ESTÁ COMIENDO ESTÁ (nombre de la niña), POR QUÉ NO ESTÁ COMIENDO ALGO MÁS DECENTE!!!!.-

 Andres, estaba a punto de llorar por el fuerte regaño que le dio. -Es que yo..yo…yo-. No pudo contenerse más y empezó a llorar. 

-Ay hermanita ..., ¿qué te está pasando? ¡Me estás preocupando!-. 

-Es que… nose que hacer, no tengo dinero, apenas puedo comprar para mi….- 

Ay pues pide una ayuda del gobierno, de madre soltera

-QUE!!?? de ninguna forma!!! ESO ES PARA GENTE POBRE Y HUEVONA!!

-Mijita, adivina que eres!!!-

Eso la dejó sin palabras , lo que no sabía esa vieja era que él no era su hermana, no era como ella ni todos sus nuevos vecinos, y si todo salía bien en cualquier momento dejaría esta vida de mierda y a todos esos jodidos

Mañana iría a recuperar su antigua vida. 

Capítulo 6

Era Sábado por la mañana, ya estaba decidido que hoy iba a recuperar mi cuerpo a toda costa. Tener que haber convivido con esa gente durante una semana había sido suficiente . Me estaba volviendo loca , digo loco . Salí de la casa, cada segundo que pasa, me daba una terrible ansiedad, estaban muy oscuras las calles, la valentía que tenía al salir de la casa se me fue. Esta era la primera vez que salía solo y desde muy temprano. 

Cada paso que daba sentía que se me iba a aparecer alguien y me iba a asaltar, estuve 40 minutos caminando sin rumbo, ya estaba apunto de ponerme a llorar en ese momento. Traté de calmarme, busqué mi teléfono para usar el google maps, pero al buscarlo empecé a preocuparme, sentí la frente fría, y unas ganas enormes de vomitar “NO TRAÍA EL CELULAR”. 

Me estaba hiperventilando, “Que pasara si me pierdo? ¿Y si ya no regreso ni a mi casa ni a la de esta señora? ¿Y si me secuestran? ¿Dónde voy a dormir?” Entre todos esos pensamientos me atravesó una idea como flecha: LA NIÑA!!!. Se me empezaron a salir las lágrimas de desesperación, quería regresar a la casa pero no podía, no sabía cómo!!.  

Pasaron unos cuantos minutos y ahí estaba en la banqueta llorando, -no no no Qué pendejo!!!- decía entre lágrimas y con las manos en la cabeza. Estaba desesperado, mi estómago estaba revuelto. 

 En eso escucho que alguien me está hablando.  -Señorita, está bien?? ¿Hay algo en que la pueda ayudar?-.

 Voltee a verlo, y con lágrimas en los ojos -Yo…yo, estoy ... .perdida..- Se me había quebrado la voz. 

-Quiere que le ayude, ¿necesita mi teléfono para llamar a alguien?.

 -No!!, Yo solo quiero ir al metro…-. 

-Ahh, okay no se preocupe, mire el metro es todo derecho, pasando la pollería da vuelta a mano izquierda y se camina dos calles, y ahí está la estación “Cerro de la estrella”. 

Me ayudó a pararme,  y me intenté secar las lágrimas -Gracias…-. 

-No se preocupe señorita, perderse en esta colonia es normal, yo una vez me perdí buscando la tiendita de la esquina- 

Me empecé a reír,  ya se me había olvidado del porqué estaba llorando. Hubo un silencio un poco incómodo. -Bueno, este ... .ya me tengo que ir-. El también reaccionó un poco tarde. -Este, a si yo también-. 

Seguí las indicaciones que me había dado, y dos calles antes de llegar a la pollería  vi la casa de esta señora, me puse la mano en la cabeza. “A, que pinche oso!!”

Por fin había llegado al metro, esta era la segunda vez que me subía a él, ya habían pasado años desde que me subí por primera vez, me acerque a las taquillas a comprar un boleto. Mientras avanzaba la fila, no encontraba dinero “No, no, otra vez no” ya no quería hacer el pinche oso, pero por suerte encontré 50 pesos. 

Pase los torniquetes y vi las pésimas condiciones en las que estaba el metro, había basura, los torniquetes ya ni servían, el poli solo estaba para que nadie se saltara, seguía viendo lo ineficiente de las instalaciones, hasta que me estrelle con unos hombres. Ellos me vieron con total indiferencia, y desprecio. Yo no le di importancia, así que espere a que llegara el metro. 

Llevaba 4 intentos tratando de subirme al metro, pero cada vez que me subía me empujaban o no cabía. Pero este último que paso, traté con todas mis fuerzas, meter mi pequeño, débil y flácido cuerpo al metro. “Por Fin!!” Dije en voz baja, con cierto orgullo, voltee a ver a mi alrededor, veía a toda la gente con ojeras, vestidas y cambiadas para ir a trabajar. 

Pase el rato distrayéndome con los vendedores ambulantes que pasaban a ofrecer sus productos, -Si buenaaas tradess, le vengo ofreciendo la nueva pomada, quita moretones, imperfecciones, dolores, a 10 pesos le doy, 10 pesos vale, 10 pesos cuesta….-. En eso siento como alguien me estaba tocando mi trasero, trate de moverme pero a donde me fuera este tipo me seguía, así estuvo un par de minutos, hasta que comenzó a llenarse el vagón una vez más. 

A pesar de que el metro estaba lleno, regreso de manera más insistente, me tocó de forma disimulada los senos, trate de golpearlo y aunque mi fuerza no le hacia nada, sus avances eran más bruscos. Sentí su pesada y asquerosa respiración en el cuello, pero lo que fue el  colmo. Fue la gota que derramó el vaso, pasó sus dedos por mis curvas, pasando por mis glúteos y terminó por mi vagina, me los intento hundir mientras los frotaba.  Quedé en shock y dejé escapar un leve gemido. 

No sabia que hacer, así que me bajé en la siguiente estación. Al salir voltee para verlo, era un tipo gordo con playera del America, me mando un beso,y procedió a olerse los dedos.  

Sentí un profundo asco de él, y profundo asco del metro, un asco hacia mí por no saber que hacer, cómo había dejado que me tocara. 

Al salir del metro, seguí caminando entre la calles por suerte reconocí alguna de ellas, eran las de la Roma Sur, así que pude encaminarme a mi verdadera casa. 

Mi cuerpo estaba sudando y sentía el movimiento de mis pechos al caminar, “MALDITA SEA, PORQUE NO ME LLEVE UN SOSTÉN!!”  este cuerpo no tenía mucha condición, ahora tenía sobrepeso, me costaba seguir el ritmo, era un infierno caminar cuesta arriba. Había momentos en los que me detenía para poder dar un respiro.

Estuve caminando por un rato, pase por donde estaban la construcción del nuevo MALL, se veía muy bonita, alomejor y le daba más calidad a esta zona y aumentaba su plusvalia. Pero mis pensamientos fueron interrumpidos por, algunos albañiles, algunos me chiflaron y otros… - ¿Cuánto por llenármela de caca?-  Yo sólo aceleraba el paso lo que ocasiona que mis lonjas se sacudieran más.

Parecía que los había perdido. Estaba a escasos metros de mi casa, me quedé ahí, meditando, preguntándome “qué dirían de mí al verme?” me quedé varios minutos mirando la entrada ¿estaría mi cuerpo ahí adentro ?  sentí como mis intestinos se revolvían , cómo le explicaría a mi familia esta situación tan bizarra? , no tenía muchas oportunidades sin embargo no tenía opción, me armé de valor  y decidí ir directo a la puerta. 

Mis manos estaban sudorosas , cuando me acerqué al timbre noté lo alto que ahora estaba el timbre  pero me hizo recordar que era yo quien se había encogido … los latidos se aceleraban, “¿qué demonios?” solo iba a entrar a mi casa como lo había hecho cientos de veces en el pasado . no era nada del otro mundo cuando alcé mi mano para tocar el timbre la puerta de mi casa se abrió de pronto…